“Yo hace 5 años que no los veo a mis tres nietos”. Con esta desgarradora declaración, Susana Escalante, una jubilada chaqueña, rompió el silencio al aire de Alerta Urbana este viernes para visibilizar una lucha que lleva media década: poder volver a abrazar a sus nietos, J.T. (de 16 años), Y. V. (11) e I. E. (7). 

La madre de los niños, según denuncia, se lo impide sistemáticamente, contando incluso con la presunta complicidad de su propia madre, Adriana Zampar, quien trabaja en Casa de Gobierno. El caso está en manos del Juzgado de Familia 6.

La abuela paterna relató un aterrador episodio de acoso ocurrido hace tres años. Tras recibir autorización judicial para visitar a sus nietos, al llegar a la vivienda, “salen los vecinos y me atormentan, me acosan, me empiezan a agarrar con cascote y me dicen que me mande a mudar porque me van a hacer”. 

Su preocupación se agravó al conocer el estado de su nieto mayor. Según Escalante, la directora de la escuela confió en ella que Joaquín, “al poco tiempo de ingresar a la escuela ya comenzó a mearse y no comenzó a hablar, empezó a tener mucho miedo”. Peor aún, la propia directora habría sido amenazada por la madre y su abogada para que “se calle la boca”.

“Estoy desesperada por mi nieto porque no sé si él fue violado, fue abusado, no sé…”, expresó con angustia, reflejando la incertidumbre que la carcome ante la falta de contacto. A través de la Defensoría, ya que no puede costear un abogado privado, intenta sin éxito que la justicia garantice su derecho al vínculo. Incluso un acuerdo judicial para una mediación reciente fue incumplido por la madre, que no se presentó.

Mientras espera que su voz sea escuchada, Susana continúa con su desesperado pedido: “Necesito ayuda urgente, por favor”.