Christian Sandoval, ex contratado de la Policía del Chaco, rompió este viernes el silencio para denunciar lo que califica como un "abuso y uso de autoridad" sistemático que pone en riesgo la vida de su hijo de 4 años. En una entrevista exclusiva con Alerta Urbana y mediante una denuncia formal en la Comisaría Cuarta, Sandoval expuso la compleja situación que mantiene con su expareja, Sofía Ana Laura Bravo, agente activa de la Comisaría Sexta de Resistencia.

"Yo vengo acá a este medio porque ya es la hora de hablar porque ya no voy a esperar a que le pase algo a mi hijo", declaró Sandoval con evidente angustia. 

El conflicto escaló hasta involucrar al propio jefe de Policía, el comisario general Fernando Romero, quien según Sandoval firmó en 2023 una disposición que lo obligaba a "cesar toda acción en contra de la señora Bravo" bajo amenaza de despido.

La situación se volvió crítica el 2 de diciembre de 2024, cuando Sandoval radicó una denuncia por delito contra la integridad sexual contra Héctor Bravo, abuelo paterno del niño. 

La línea 102 recomendó que el acusado no se acerque al menor, medida que según Sandoval es constantemente violada. Como prueba, presentó en su denuncia una captura de WhatsApp donde se observa al niño con el supuesto abusador en el Polideportivo Jaime Zapata.

"¿Qué están esperando? ¿Que mi hijo sea un nuevo Lucio Dupuy y que termine muerto”, aseguró el hombre, en referencia al caso del niño de La Pampa asesinado a golpes por su madre y su pareja en 2021.

El jardín de infantes donde asistía el menor también encendió las alarmas. Personal educativo de esa institución le habría confirmado a Sandoval que su hijo relató que "le tocaron la cola" y que "la madre los iba a matar a todos", mostrando además conductas violentas.

Sandoval relató un incidente particularmente grave ocurrido el 19 de enero de 2024: "Sacó su arma reglamentaria, desenfunda, apunta hacia mí. Yo tenía a mi hijo en brazos". Este hecho generó la causa por amenazas con arma de fuego (expediente 44931/2024-1) contra Bravo.

Actualmente, Sandoval lleva una tobillera electrónica impuesta tras intentar contactar a directivos del jardín, mientras acumula 14 denuncias que considera instrumentadas para alejarlo de su hijo.