Domingo
30 de Marzo de 2025
INTERNACIONALES
18 de marzo de 2025
Los ataques aéreos golpearon distintos puntos del enclave palestino, incluyendo refugios y zonas humanitarias.
La tregua en Gaza llegó a su fin de manera abrupta en la madrugada del martes, cuando Israel lanzó una ofensiva aérea masiva sobre distintos puntos del enclave palestino. Según el Ministerio de Sanidad gazatí, al menos 404 personas han muerto y otras 562 resultaron heridas en los bombardeos, que impactaron en refugios, escuelas y zonas humanitarias. La reanudación de las hostilidades marca un punto de inflexión en el conflicto, que había mantenido un frágil alto el fuego desde el 19 de enero.
El gobierno de Benjamín Netanyahu justificó la decisión en la negativa de Hamas a liberar a los prisioneros israelíes aún en su poder y en su rechazo a las propuestas estadounidenses para extender la tregua. “A partir de ahora, Israel actuará contra Hamas con cada vez más fuerza militar”, declaró la oficina del primer ministro, en un comunicado que también reveló que la operación fue aprobada el pasado fin de semana. Minutos después, el Ejército confirmó que los ataques eran parte de una ofensiva a gran escala contra “objetivos terroristas” en la Franja de Gaza.
Los ataques han golpeado de manera indiscriminada a la población civil, denunció el gobierno gazatí. Imágenes provenientes del enclave muestran cuerpos entre los escombros y escenas de desesperación en hospitales desbordados. La mayoría de los fallecidos, según reportes locales, son mujeres y niños, lo que agrava aún más la crisis humanitaria en la Franja, donde la escasez de combustible y suministros médicos ya ponía en riesgo a miles de personas antes de la reanudación de la guerra.
La reactivación de los combates supone un duro golpe para las negociaciones en curso. Hamas acusó a Netanyahu de torpedear el acuerdo para la liberación de prisioneros, cuya segunda fase aún estaba en discusión. “Netanyahu y su gobierno extremista han revocado el alto el fuego y están poniendo en peligro a los prisioneros en Gaza”, afirmó el grupo en un comunicado. Mientras tanto, en Israel, sectores ultraderechistas han celebrado la ofensiva, presionando para una guerra total que lleve a la destrucción definitiva de Hamas.
El regreso de la violencia también ha generado reacciones en el plano internacional. La Casa Blanca confirmó que Israel le consultó antes de retomar los ataques, aunque no detalló el contenido de las conversaciones. En Tel Aviv y Jerusalén, manifestaciones espontáneas surgieron en protesta contra Netanyahu, especialmente tras su decisión de despedir al director del Shin Bet, Ronen Bar, en un contexto de creciente inestabilidad política.
Con la ofensiva en marcha y las negociaciones en peligro, Gaza se sumerge nuevamente en un escenario de devastación e incertidumbre. La comunidad internacional observa con preocupación el deterioro de la situación humanitaria, mientras Israel refuerza su ofensiva y Hamas promete represalias. La guerra, que parecía haberse detenido tras dos meses de tregua, vuelve a escalar sin un horizonte claro de solución.