Las uvas, uno de los frutos más antiguos y valorados en la agricultura mundial, no solo son deliciosas, sino también aliadas de la salud ocular. Aunque popularmente se relaciona a la zanahoria con el cuidado de la vista, estudios recientes muestran que las uvas pueden ofrecer beneficios incluso superiores gracias a sus antioxidantes. 

Las uvas contienen compuestos como el resveratrol y las antocianinas, que ayudan a proteger los ojos del daño oxidativo, factor clave en la prevención de enfermedades como las cataratas y la degeneración macular. Según la Academia Americana de Oftalmología, estos antioxidantes favorecen la integridad de las arterias que transportan oxígeno y nutrientes a los ojos, lo cual es esencial para mantener la visión en óptimas condiciones a lo largo de los años.

Investigaciones realizadas en la Universidad Nacional de Singapur revelaron que quienes consumieron uvas regularmente experimentaron una mejora en su salud ocular, observando un incremento en la densidad del pigmento macular y en la capacidad antioxidante del plasma. Con esta evidencia, las uvas se posicionan como un alimento fundamental para quienes desean proteger su visión y disfrutar de sus múltiples beneficios.

Además, la Clínica Baviera señala que los antioxidantes de las uvas pueden inhibir la formación de productos de glicación avanzada (AGE), dañinos para la retina. Así, incorporar uvas a la dieta puede ser una estrategia natural para cuidar la salud visual a largo plazo y prevenir enfermedades relacionadas con la edad.