El intendente de Resistencia, Gustavo Martínez, recordó el Día de la Lealtad Peronista con un mensaje dirigido a “fortalecer los principios de solidaridad, justicia social e igualdad en un difícil contexto nacional y mundial generado por la pandemia del coronavirus”. Pero al mismo tiempo instó a todos los dirigentes a “considerar a una nueva generación que, por ser parte activa de un mundo hiperconectado, exige otras demandas que van más allá de la militancia o los mensajes partidarios”. En cuanto a las consecuencias del virus que afecta todavía a todo el planeta, el jefe comunal capitalino consideró que “en el marco de esta situación de la humanidad, hay que aferrarse más que nunca a los principios justicialistas y la lealtad fundamental a los valores”. “Hoy vemos que esta pandemia ha jaqueado y ha puesto en superficie la fragilidad del hombre y la humanidad. Vemos que es más necesaria que nunca la justicia social. Vemos que es más necesaria que nunca la igualdad cuando tenemos familias muy humildes que padecen esta enfermedad y que no tienen la misma atención que aquellos que pueden pagar un buen servicio privado. Vemos que es más necesario que nunca el Justicialismo, la igualdad y la justicia social”, agregó sobre la emergencia sanitaria a nivel global.  Si bien Martínez expresó que “estos valores y estos principios tienen que tener toda nuestra lealtad”, al mismo tiempo reflexionó que “como movimiento político también tenemos que plantearnos una gran capacidad de entender a una gran cantidad de ciudadanos y ciudadanas que constituyen la franja de entre 16 y 40 años, que son ciudadanos del mundo sin haber viajado por el mundo, que han vivido toda su vida adulta dentro de la conectividad de Internet”.    “Son ciudadanos de otras características y tenemos que comprender que como movimiento político tenemos que tener la capacidad de, con la lealtad de nuestros principios de solidaridad, justicia social e igualdad, interpretar a esas nuevas generaciones que obviamente tienen otras demandas y que ya no únicamente están aferrados a la liturgia histórica tradicional que nos gusta a todos nosotros por ser militantes hace mucho tiempo, sino que pretenden otras cuestiones y tenemos que tener la capacidad de darles respuesta”, concluyó.