Walter Santiago Binaghi tenía 20 años. Llegó de trabajar y salió a comprar queso para hacerse unos sándwiches cuando fue embestido por un motociclista que hacía willy, una maniobra imprudente con la moto. La víctima agonizó por una semana hasta que falleció producto de las lesiones. A un mes y pocos días que comience el juicio, Daniel Walter Binaghi, papá de Santiago. “No quisiera que le pase a nadie. Tiene que tener un castigo ejemplar para que sienta precedente”, dijo.

Santiago hubiera cumplido 21 años en agosto. “Era un gordito simpático, entrador, le gustaba la música, tocar la guitarra. En diciembre había terminado la secundaria que la había abandonada, y después consiguió su trabajo en el puerto”, recordó Walter visiblemente emocionado al hablar del menor de sus hijos.

El siniestro mortal ocurrió el pasado 14 de enero en Bahía Blanca, a una cuadra y media de la vivienda de la víctima.

 “Mi hijo salió del trabajo en el club de Pesca de Ingeniero White, y fue para la casa. Había comprado fiambre para hacer sándwich, pero se había olvidado del queso, entonces volvió a salir de nuevo con su moto, una Motomel 110. Él circulaba por la calle Reconquista, y cuando tomó por Juan B. Justo viene una moto Honda modelo XR 150 que hacía willy, que lo impacta de atrás”, detalló el papá de la víctima.

El responsable de la temeraria maniobra fue identificado como Fabián Seijas, que en ese entonces tenía la misma edad de la víctima y conducía la motocicleta con la rueda delantera levantada con la que embistió a Binaghi de manera violenta.

 “Yo estaba en el trabajo, me avisó la pareja de él que había tenido un accidente”, remarcó el papá de Santiago.

Después de agonizar por una semana, en la que nunca recobró el conocimiento, el 22 de enero su hijo falleció por un traumatismo de cráneo grave.

“No fue un choque, fue una imprudencia”, remarcó Walter.

En esa línea, señaló que “Seijas sabía lo que hacía porque acostumbraba a hacer eso, y ya había tenido problemas con otros vecinos por ese mismo problema”. Incluso, Walter remarcó que en las redes sociales, Seijas se “jactaba de hacer esas maniobras”.

Desde que pasó el hecho fatal, Seijas nunca se comunicó con la familia de Santiago para pedirles disculpas.

Únicamente durante los primeros días llamó el papá del motociclista para saber cómo estaba Santiago tras ser embestido, pero nunca más volvió a entablar diálogo.