Marianela Elizabeth Soto, madre de Alejandro Rubén Acosta, de 16 años, lanzó al aire de Alerta Urbana un desesperado llamado por la desaparición de su hijo y su novia, María Paz Maidana, de 13 años, quienes fueron vistos por última vez el pasado martes en Barranqueras. 

En diálogo con Gustavo Olivello, la mujer relató este viernes los últimos momentos conocidos de los adolescentes y expresó su profunda angustia por el suceso al tiempo que también expresó que en la Comisaría Segunda de Barranqueras no quisieron tomarle inicialmente la denuncia.

Según Soto, el martes 2 de septiembre por la tarde, alrededor de las 15, su hijo Alejandro fue a bañarse al río y regresó a casa entre las 16.30 y las 17 junto a sus compañeros y su novia, María Paz. 

Tras bañarse rápidamente en casa, el joven le preguntó por un pantalón nuevo y, al ver sus zapatillas mojadas, tomó prestadas las de su padrastro. La última comunicación que tuvo con su hijo fue cuando este le dijo: "Mami, iba a ir a ayudar a una persona allá en la rotonda de acá de Barranqueras porque él había tenido un accidente", pero no le dio detalles sobre la identidad de la persona o el lugar exacto.

Soto, madre de ocho hijos, explicó que Alejandro tenía un celular que le había comprado para la escuela. Recordó que su hijo y María Paz asistían juntos a una secundaria nocturna, pero el adolescente pidió un cambio de escuela después de regresar enojado de allí en una ocasión. Aseguró que su hijo no tiene problemas de salud, no fuma, no bebe, ni tiene tatuajes o aros, y negó cualquier problema relacionado con drogas.

Sin embargo, Soto reveló que la relación de su hijo con María Paz había generado tensiones con la familia de la menor. Mencionó un incidente en el que las hermanas de la novia "casi me rompieron mi puerta". Además, describió que la joven tenía "crisis mentales" llegando a intentar quitarse la vida o tirarse frente a los autos, situaciones en las que su hijo intervenía para protegerla.

La madre confirmó que su hijo posee un teléfono celular, a diferencia de María Paz, y que han intentado comunicarse con él incansablemente aunque sin éxito habiendo pasado ya casi tres días desde la última vez que lo vieron. 

La denuncia de desaparición fue realizada el miércoles, después de que en primera instancia “la policía no me quería tomar la denuncia" el mismo martes en que desapareció el joven.

Con la voz quebrada por la emoción, Soto hizo un llamado a su hijo y a María Paz: "Lo único que quiero es que vos, hijo, aparezcas. Estoy sufriendo acá. Todos tus hermanos, yo, todos estamos sufriendo. Te extraño mucho, no quiero que te pase nada”.