Ramón Dupuy es el abuelo de Lucio, el niño asesinado por su madre y su pareja en noviembre de 2021, en un crimen que lo movilizó para poner en la agenda la necesidad de legislar y concientizar sobre la importancia de los derechos de la infancia.

En diálogo con Alerta Urbana, se refirió a su paso por la provincia para dictar las capacitaciones sobre la Ley que lleva el nombre de su nieto y cómo encara la vida a partir de una pérdida tan grande y en las circunstancias en la que fueron.

“Había dos opciones, o quedarnos a llorar y hacer un duelo como corresponde o cumplir con la promesa que le hicimos a Lucio y salir a pelear por todos los niños de la Argentina y que no existan más familias destrozadas”, indicó.

La Ley Lucio establece capacitaciones continuas, permanentes y obligatorias en derechos de los niñas, niños y adolescentes, para “personas que se desempeñan en áreas y dependencias de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial del Estado nacional, que forman parte corresponsable del Sistema Integral de Promoción y Protección de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes”.

Además de las capacitaciones para integrantes de los tres poderes del Estado, Dupuy estará este sábado en el Centro Cultural Nordeste, desde las 18, en una charla sobre el registro de obstructores de vínculos familiares.
 

EL CASO

Lucio fue asesinado el viernes 26 de noviembre de 2021. Lo mataron a golpes. Sin embargo, entre el 15 de diciembre de 2020 y el 23 de marzo de 2021, el niño ingresó cinco veces a distintos centros de salud de La Pampa para ser atendido por golpes, fracturas y traumatismos.

El día del crimen, su madrastra salió a las 21.26 horas con el cuerpo del nene en andas de su domicilio de La Pampa buscando auxilio. Unos vecinos y una enfermera le hicieron RCP. Y después lo llevaron a un hospital. Allí un médico certificó la muerte a las 21.45 horas.

La autopsia reveló que lo mataron a golpes. Le estalló el hígado. Le pegaron con un palo y después tenía la marca de una pisada: era la suela de la zapatilla que tenía de Abigail Páez. También le pegaron una trompada: tenía los nudillos marcados en el rostro. Los golpes en la cabeza le provocaron la inflamación del cerebro.

En el cuello tenía quemaduras hechas con un cigarrillo o la punta de un sahumerio, reveló la sentencia del caso.

Los chats entre la madre y la novia revelaron que desde diciembre de 2020 las mujeres maltratan a Lucio, cuando tenía 4 años y medio. Lo golpeaban, y lo castigaban con penitencias que eran como torturas.

En esos chats ambas admiten que querían que "desaparezca": mientras la madre se quejaba de los golpes que Páez le daba a Lucio, la novia le reprochaba que la madre lo quería matar.