Un jubilado identificado como Horacio Blanco, de la localidad de Puerto Tirol, denunció públicamente la grave demora en la provisión de insulina por parte del INSSSEP (Instituto de Seguridad Social, Seguros y Préstamos) para su esposa, quien padece diabetes insulinodependiente. El hombre manifestó que, a pesar de realizar el pedido con quince días de antelación al agotamiento de la dosis, la actual solicitud lleva un mes sin ser atendida.

La preocupación de Blanco radica en que, si bien su esposa aún cuenta con una reserva de medicación, teme que esta se agote antes de que el Instituto entregue la nueva provisión, poniendo en riesgo la salud de la paciente. La insulina es un medicamento vital para el tratamiento de su enfermedad, y la falta de respuesta del INSSSEP genera incertidumbre y angustia en la familia.

Ante la falta de una solución clara y la dificultad para saber con qué área específica del INSSSEP dialogar, el jubilado fue orientado a preguntar por la gerente del organismo, Carolina Bordón, quien sería la responsable de dar una respuesta a la situación. .

Sin embargo, Blanco propuso una acción colectiva para lograr mayor efectividad, sugiriendo la idea de convocar a otros afiliados que enfrentan problemas similares y presentarse "entre unos cuantos" en las oficinas centrales. Según su perspectiva, una movilización grupal tendría "más peso" para conseguir una respuesta urgente y solucionar la demora en la provisión de medicamentos esenciales.