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25 de Abril de 2025
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25 de abril de 2025
El menor, de seis meses de edad, se encuentra en estado crítico mientras las autoridades investigan si se trató de un error o un acto intencional. El acusado, con 13 años de experiencia, fue detenido y enfrentará una audiencia imputativa.
Un escándalo conmociona al sistema de salud jujeño luego de que un enfermero del Hospital Materno Infantil inyectara leche en el suero intravenoso de un bebé de seis meses, dejándolo en estado gravísimo con riesgo de vida.
El hecho, calificado inicialmente como "lesiones graves", podría recategorizarse según la evolución del niño.
El Ministerio Público de la Acusación tomó intervención en el caso, a cargo del fiscal Guillermo Beller, quien confirmó que el acusado fue arrestado y su teléfono celular secuestrado para un análisis forense. También se revisarán las grabaciones de las cámaras de seguridad del hospital para determinar si el acto fue deliberado o producto de una negligencia extrema.
En una conferencia de prensa, Beller detalló que el enfermero habría administrado entre 50 y 60 mililitros de leche por vía endovenosa, una cantidad peligrosa para un lactante. "Es mucho líquido, por eso se entiende que corre riesgo la vida. Podría haber tenido un desenlace fatal", explicó. Aunque lo calificó como un "hecho aislado", aseguró que la investigación avanza con "celeridad" y que en pocos días podría elevarse a juicio.
El imputado, de 13 años de experiencia y sin antecedentes, permanece detenido a la espera de la audiencia imputativa de este viernes, donde se resolverá su situación legal.
Alejandra Argota, la madre del niño, contó a El Tribuno el momento del horror: "Cuando vi que ya habían pasado los 60 mililitros, empecé a gritar. Rápidamente llegaron médicos y enfermeros a atenderlo". Con voz quebrada, describió cómo la leche recorrió el torrente sanguíneo del bebé: "Pasó por su cerebrito, corazón, riñones y pulmones. Podría haberle causado un paro cardíaco".
Aunque los médicos lograron estabilizar al menor, su condición sigue siendo crítica. "No está grave, está gravísimo. Solo con la ayuda de Dios podemos salir adelante", afirmó Argota, quien agradeció el apoyo del equipo médico.