Ante la falta de información por parte de los adultos, con una investigación empantanada, es clave lo que puedan aportar los niños que concurrieron con Loan Peña al naranjal el 13 de junio de este año, última vez que se lo vio al pequeño que busca un país.

Así, se realizó una Cámara Gesell en la que quienes compartieron los últimos minutos de lo que sabe del chico respondieron a psicológos que el chico fue llevado por un hombre que tenía “un buzo con capucha y tatuajes”.

A más de 50 días de que sucediera el hecho y caída la hipótesis de que Loan pudo haber sido asesinado y sus restos enterrados en 9 de Julio (se hicieron procedimientos en el cementerio, en propiedades de los detenidos y nada) Alerta Urbana puede afirmar que se reflota la pista de un rapto como venganza contra un integrante de la familia, por cuestiones vinculadas al narcotráfico.

Lo cierto es que la imagen que se adjunta esta nota muestra a una persona vinculada a la comercialización de estupefacientes que tendría un “ajuste de cuentas” con un hermano del chico de 5 años.
 

JUSTICIA PROVINCIAL

Antes de que se decidiera el pase al fuero federal (aun cuando no está firme la hipótesis de la trata) el 24 de junio el fiscal Guillermo Barry señaló que no “se podía descartar ninguna hipótesis y que la firme es que alguien lo haya llevado” ese mismo día en el contacto con los medios sostuvo que había material probatorio en el expediente que no se podía “divulgar”.

¿Habrá sido que tenían pistas de un rapto y luego con el pase a la Justicia Federal esa investigación se diluyó? Habrá que esperar los próximos días y el valor que le da la jueza Cristina Pozzer Penzo al testimonio de la Cámara Gesell.