Un aberrante hecho de violación indignó a la opinión pública en la provincia de Corrientes. ¿Qué ocurrió? Un reconocido kinesiólogo y fisiatra fue condenado a siete años de cárcel este martes por abusar de un chico de 13 años.  

Pese a las concluyentes pruebas en su contra, el hombre negó haber cometido los aberrantes ataques sexuales. Sin embargo, según adelantó Crónica, llegó preso al juicio y los jueces del Tribunal le impusieron además una prohibición absoluta de contacto con la víctima.

Cabe destacar que el joven continúa bajo tratamiento psicológico. ¿Quién es el pervertido? Se trata de Alfredo Acevedo —58 años—, quien cuenta con una prolongada trayectoria en una de las comparsas más conocidas de la capital correntina.                        

 El sujeto "juró que el hecho nunca existió" y que además, su vida "se convirtió en un calvario" desde la denuncia de los padres del menor. Asimismo, cabe destacar que Acevedo llegó a juicio con una expectativa de pena de 20 años de prisión.

El motivo es que durante la instrucción de la causa se lo acusaba de un delito de abuso doblemente agravado. Pese a esto, para el fiscal Edmundo Schmitt, únicamente se trató de un hecho de abuso sexual con acceso carnal, por esto solo pidió una condena de ocho años de prisión.

Kinesiólogo violador: los macabros detalles del caso

Esta causa comenzó el 6 de agosto del 2021, más precisamente un día después de que el adolescente y su hermanito estuvieran en el consultorio del kinesiólogo. Por aquel entonces, él supervisaba el tratamiento de reeducación postural que ambos realizaban hacía varios años.                          

Sin embargo, la denuncia no fue inmediata. El pibe no reveló lo acontecido a sus papás, pero llamó desde su casa a la Línea 137 —de Violencia Familiar y Sexual—, para contar los pormenores del abuso que había sufrido, ya que no quería que otros pacientes pasaran por lo mismo.

Tras tomar conocimiento, el operador supo que la víctima era un adolescente, y pidió contactarse con los padres, que se mostraron sumamente impactados por lo sucedido.

El muchacho reveló que una vez dentro del consultorio, Acevedo le ordenó que se bajara los pantalones y luego lo accedió carnalmente, no sin antes advertirle "que no pidiera ayuda" porque lo iba a lastimar a él, a su hermano y a su mamá.              

La investigación quedó a cargo del fiscal Gustavo Robineau y la jueza de Instrucción Josefina Gonzalez Cabaña, quien ordenó un examen médico del adolescente y una declaración en Cámara Gesell para evitar su revictimización.  

Asimismo, se dispuso la detención de Acevedo ante la posibilidad de que se escapara —debido a que contaba con los recursos necesarios para mantenerse prófugo—. Por esto, en octubre del año pasado, la jueza le dictó el procesamiento y prisión preventiva.