Al menos ocho combatientes extranjeros integrantes de milicias pro-iraníes murieron en una operación aérea israelí en Siria, afirmó este miércoles el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH).

Los ataques nocturnos fueron contra una posición y un depósito de armas de las fuerzas iraníes y de su aliado libanés, el movimiento chiita Hezbollah, cerca de Damasco, así como una posición de una milicia pro-iraní en el sur del país, según el OSDH, una ONG con sede en el Reino Unido pero con un gran amplia red de colaboradores sobre el terreno.

La organización advirtió de que “la cifra de los muertos podría aumentar debido a la presencia de heridos, algunos de ellos graves”.

Aseguró también que este es el ataque número 36 de Israel contra el territorio sirio en lo que va de año y que también se dirigió contra una posición militar de la milicia “Resistencia Siria para la Liberación del Golán”, en la zona de Quneitra.

No se conocía por el momento la nacionalidad de las víctimas.

Según la agencia de prensa oficial siria Sana, los bombardeos tuvieron lugar poco antes de medianoche cerca del pueblo de Rwihinah en la provincia de Quneitra (sur) y en la región de Jabal al-Manea en la provincia de Damasco.

El ejército israelí no hizo comentarios sobre estas informaciones, mientras que Sana, que cita una fuente castrense siria, dice que hubo “únicamente daños militares”.

El conflicto sirio, que comenzó con la represión sangrienta de las manifestaciones prodemocracia, se ha complicado a lo largo de los años con la implicación de potencias extranjeras y grupos armados. La guerra ha dejado ya más de 380.000 muertos y millones de desplazados.

fuente: Infobae.