Juan Arregín, abogado de la madre de la niña Cielo, criticó duramente este jueves la reciente resolución judicial que otorgó la tutela absoluta de la menor a la familia paterna.

En diálogo con Gustavo Olivello al aire de Alerta Urbana, el letrado calificó la decisión como "arbitraria" y sostuvo que la justicia está ejerciendo una "mirada selectiva y específica respecto de esta niña".

“La resolución de la Justicia es una resolución de venganza”, aseguró Arregín, enfatizando en su rechazo a la determinación.

El martes se conoció la decisión de la Sala Cuarta de la Cámara de Apelaciones Civil y Comercial de Resistencia, que confirmó una resolución del Juzgado de Niñez, Adolescencia y Familia 1, que otorgó la guarda provisoria de la niña a sus abuelos paternos, ante la imposibilidad de garantizar condiciones adecuadas en el hogar materno. 

La sentencia, emitida el 16 de diciembre de 2024 y ratificada por los camaristas Fernando Heñin y Eloisa Barreto, se basó en el artículo 657 del Código Civil y Comercial y en un extenso proceso interdisciplinario que incluyó 14 informes técnicos y cerca de 100 páginas de resolución.

En el texto judicial, la Cámara coincidió con la asesora de Niñas, Niños y Adolescentes en que el retorno al cuidado materno sería posible solo si se garantiza el contacto con la familia paterna, algo que aún no se ha logrado. 

Arregín recordó que la situación se inició el 17 de diciembre pasado, cuando la niña Cielo fue sacada de su hogar para una custodia provisoria con los abuelos paternos. Para el abogado, esta acción inicial y la posterior confirmación judicial no respetaron el derecho de la niña a ser oída ni su interés superior, dado que su centro de vida y entorno familiar estaban con su madre.

Al mismo tiempo, cuestionó que una madre que cuida a su hija y fomenta su interacción social sea "sancionada de esta manera", contrastando con otros casos en la provincia.

En contraposición, los jueces advirtieron que persisten vulneraciones a los derechos fundamentales de la niña, como la identidad, la salud y la intimidad. También subrayaron la obligación de preservar la confidencialidad del caso, y destacaron que la verdadera solución llegará solo con la cooperación de todos los adultos involucrados, priorizando siempre el interés superior de la niña.

Arregín, contundente

El profesional del derecho que patrocina a la madre de la menor fue enfático al declarar que la resolución "suena más a venganza que a justicia". 

Argumentó que si el fundamento es que la madre "amputó la relación con la familia paterna", la solución de anular la relación con la familia materna es una medida de "venganza". 

Al respecto, destacó que la sentencia "no dice nada" respecto a la necesidad de que la madre y la niña sigan revinculándose, y que, hasta el momento de la entrevista, la madre no podrá ver a la niña, considerando esto lo más "arbitrario" de la definición.

Finalmente, afirmó que el caso "no está terminado" y advirtió que buscarán llegar "hasta la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH" si no se resuelve de manera que consideren justa, pues a su entender, se violan los derechos de una niña que "no estaba en situación de peligro" ni "siendo vulnerada en sus derechos por parte de la madre".