El fiscal federal de Resistencia, Patricio Sabadini, ha puesto en la mira al empresario Roberto Nardelli, el denominado "Rey del Desmonte" en el Chaco, por una serie de operativos de tala ilegal de bosque nativo en la provincia.

Este lunes, al aire de Alerta Urbana y en conversación con Gustavo Olivello, Sabadini no solo confirmó que solicitó la detención del empresario, sino que también ha expresado su frustración ante lo que considera una burla a la justicia. 

Según el fiscal, Nardelli está acusado de "realizar desmontes ilegales en la provincia y desobedecer la prohibición vigente en el Chaco".

La situación se agrava, según Sabadini, porque "una máquina que aparentemente la tenía en depósito judicial y con la cual no podía seguir desmontando, la reactivó y llevó adelante esta acción". 

Este hecho fue calificado por el fiscal como una maniobra para "tomar de ingenuos, por no usar una palabra más intensa, a la jueza federal (Zunilda Niremperger) y a quien les habla".

A pesar de la prohibición judicial, Sabadini denuncia que "personal de confianza de él (por Nardelli) ingresa al campo, la extrae donde se encontraba bajo depósito judicial y continúa con el desmonte". Esta acción es vista por el fiscal como un claro "entorpecimiento en la investigación, además de ser una desobediencia judicial".

Un punto particularmente llamativo es la restitución de las máquinas incautadas a Nardelli por parte del Ministerio de la Producción del gobierno provincial tras el pago de una multa. 

Al respecto, Sabadini cuestionó la efectividad de las sanciones. "Lo que pasa es que la cuestión es que si en términos prevención general, podemos desmontar total pagamos la multa; y en términos de prevención general no hay un incentivo para dejar de cometer los desmontes", dijo.

Con este panorama, las acciones de Nardelli y las circunstancias que rodean la restitución de sus herramientas de desmonte plantean una interrogante inquietante: ¿quién o qué está permitiendo que el "Rey del Desmonte" continúe operando en el Chaco?