La madre de Maira, Antonia Morán, expresó su angustia y volvió a pedir respuestas en una entrevista con Alerta Urbana.

Antonia Morán, madre de Maira Benítez, se mostró nuevamente afectada por la noticia y, como es habitual en este caso, se hizo presente en el lugar del hallazgo. "Las dudas y la ansiedad siempre están presentes. Cuando me enteré, no dudé en ir al lugar. La única desaparecida aquí es Maira", expresó Morán.

Este caso se caracteriza por su particularidad, ya que fue uno de los primeros en el país en el que se dictó una condena sin que se hubiera encontrado el cuerpo de la víctima. Sin embargo, el descubrimiento de restos óseos en un terreno cercano reavivó la esperanza de esclarecer lo ocurrido.

Según informaron fuentes policiales, fueron los propios trabajadores de la construcción quienes, mientras realizaban excavaciones para una nueva base de cimentación, hallaron los restos óseos a una profundidad aproximada de 80 centímetros. El terreno en cuestión se encuentra en la calle Los Quebrachos 1142 y pertenece a María del Carmen Montoya, una mujer de 47 años de nacionalidad colombiana.

Al percatarse del hallazgo, los trabajadores notificaron inmediatamente a la Fiscalía, que dispuso la intervención de la División de Criminalística para el análisis de los restos encontrados.

Investigación en curso

Antonia Morán no descartó que el hallazgo esté vinculado a personas que anteriormente alquilaron la propiedad. "Seguramente se investigará a los colombianos que alquilaban ese lugar, aunque no recuerdo si ya estaban allí cuando desapareció mi hija", dijo la madre de Maira.

La fiscal Gisela Oñuk, a cargo de la causa, ordenó el secuestro de los restos óseos y su traslado al Instituto Médico Forense para realizar los peritajes correspondientes y determinar si pertenecen a Maira Benítez.

"Espero que, una vez que se realicen todas las pruebas, me den una respuesta correcta", afirmó Morán, haciendo referencia a una pericia anterior que resultó errónea, lo que aumentó su desconfianza en los procesos de investigación.

EL CASO

Maira Benítez tenía 17 años cuando desapareció el viernes 16 de diciembre del 2016. Salió a pasear a un parque con su hija, que tenía en ese momento tres años, y su hermana Magalí de 14 años. A la vuelta dejó a su hija en su casa y se fue a comprar chocolates y chupetines con 18 pesos en el bolsillo y nunca más volvió. Su mamá todavía busca despedirla con justicia.

En mayo del 2019, Rodrigo Germán Silva fue condenado por homicidio simple a pesar de que no habían encontrado el cuerpo de Maira. Otras tres personas estuvieron presas por “privación ilegítima de la libertad”. Antonia pedía que se investigue al patrón de Silva, un ex juez dueño de campos.