Sin embargo, la denuncia contra el Pastor sostiene que cerró las puertas de la iglesia y vendió todos los muebles y pertenencias a otra persona. En este sentido, el Pastor Bagnatori se defendió de las acusaciones en su contra.

«Había un Pastor que se llama Feliciano, que era el Pastor que asistía a la comunidad ahí en la colonia. Él en el año 2018 me pidió que quería hablar con nosotros. Vio que yo tenía amor para trabajar con los jóvenes y me llevó a ese lugar y allí había tres familias que estaban sin asistencia. Desde el 2018 al 2020, íbamos dos veces por semana, con mi familia, con hermanos acá de la iglesia y los asistimos. Y nos congregamos en el patio de la casa de ella, en una sombra», expresó.

«Antes de la pandemia, una hermana del lugar, Cristina nos cedió un espacio de terreno, nosotros empezamos a hacer una base de madera. Hicimos un pequeño salón de 4×8 para poder reunirnos. Como yo tengo a cargo acá una iglesia y mi familia, le dije que no contaba con suficiente tiempo y le pedí a una pastora que trabaja con nosotros que los ayude con las ventas de pollo y de empanadas, junto con un grupo de hermanos», añadió.

No eran todos los hermanos como esta hermana lo dice, y esto se hacía en la casa del supuesto comprador Sebastián Rivero. Pastor, hay una acusación en contra usted directamente. ¿Qué puede decir al respecto?

Después de terminar el local que se hizo en la propiedad de Cristina, comenzaron los problemas del esposo de ella, que es el del terreno, con uno de los vecinos que no le dejaban entrar en horarios que no eran el horario del culto.

Entonces aparece un vecino que me ofrece la mejora de un terreno, de 20 por 60, en ese momento en 120 mil pesos. Me pidieron que comprara y que después con la venta me iban a devolver, así que hicimos eso y se mudó todo enfrente. Rosendo fue el que hace parte de la mano de obra. El día que nosotros dejamos de ir, trajimos los equipos, no es que se trajo antes, eso estaba en manos de los hermanos ahí, porque lo usaban. Eso está guardado para que no se estropee, porque la construcción no se terminó.

Todo lo que usted tiene guardado en custodia para que no se estropee, ¿fue comprado con la plata de los fieles?

Fue con las ofrendas de los jóvenes, sí.

Entonces, ¿ellos estuvieron de acuerdo con que usted lleve lo que ellos compraron para cuidarlo?

En ningún momento se acercaron a hablar conmigo, ellos dejaron de venir a la iglesia, dejaron de congregarse totalmente.

¿Usted tampoco se acercó a hablar con ellos, a preguntarles?

Como justamente la pastora Basilisa estaba trabajando con ellos, yo tuve una reunión y les dije que me iba a retirar. Además, en Posadas tenemos un terreno donde está nuestra iglesia, nosotros tenemos nuestra actividad. Yo trabajo con mis hijos y con los jóvenes. La comunidad cristiana está para predicar del gran amor de Dios y de la salvación en Cristo Jesús.

Si esto es como usted dice, ¿por qué la gente se queja? ¿por qué la gente denuncia que las cosas desaparecieron, que se vendieron?

Eso es lo que todavía no consigo entender. Si yo mal no recuerdo el día miércoles por la tarde de la semana pasada, viene el hermano Sebastián Rivero y me pregunta que va a pasar con el lugar porque está todo sucio, se robaron los cables, las térmicas, los enchufes, se robaron todo. Entonces, me dice que Rosendo tomó la parte del fondo, 20 metros, y construyó unos chiqueros. Hizo una quinta, una plantación.

Por su parte Rosendo, dio su opinión al respecto de la situación.

¿Qué podes decir sobre lo que cuenta el Pastor?

El pastor está diciendo que él no vendió el lugar. Lo que nosotros exigimos es que venga a darnos la explicación de por qué mandó al vecino acá con una orden que tenemos que desalojar el lugar. Lo tenemos filmado.

A su vez, el pastor indicó: «esta tarde decidí ir a hablar con ellos, y que se queden con el lugar, con la estructura y con el terreno. Yo no tengo problema porque no estoy discutiendo algo económico con ellos bajo ningún concepto. Esta tarde me voy a acercar, voy a ir a la policía de Roca para que alguien me acompañe. No recibí ese dinero que se dice ni me tomé a la fuga. Me sorprende de Rosendo porque me conoce y uno invierte por la causa de la obra de Cristo, uno invierte tiempo y dinero.

Rosendo, ¿está más tranquilo ahora que el Pastor dice que va a ir ahí a entregar todo?

Sí, eso es lo que estamos pidiendo, que él venga y que nos dé la explicación, y que venga el supuesto comprador, también con él acá, porque si el Pastor está diciendo que nunca vendió, el otro vino acá con el Pastor y dijo que le vendió a 600 mil pesos dijo.

Porque el supuesto pastor le dejó encargado al mismo señor que ahora dijo ser el dueño, que él era el encargado de limpiar y de cuidar, y el mismo señor nos prohibió la entrada. Nosotros hicimos un pedido y lo llevamos a la Presidencia Pastoral de Posadas, nos dijeron que ellos no podían hacer nada, inclusive pedimos un cambio de pastor también y no tuvimos respuesta.

Pastor, efectivamente su nombre aparece como el vendedor de las pertenencias de la iglesia. ¿Qué puede decir?

Le explico, yo le hice el papel a Sebastián Rivero para que él haga desalojar del lugar a la gente, porque el terreno es de la iglesia de ellos, ellos son la iglesia. Y lo que me sorprende, que a mí no me mandaron ni un mensaje, esto se hizo como una cuestión pública, sin medir daños colaterales.

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