La Licencia Nacional de Conducir no establece un límite de edad fijo e insuperable para manejar, pero sí impone condiciones estrictas que modifican drásticamente la vigencia del permiso a medida que el conductor envejece. El sistema está diseñado para balancear el derecho a conducir con la seguridad vial, evaluando de forma más rigurosa las aptitudes psicofísicas con el paso del tiempo.

PLAZOS QUE CAMBIAN

El tiempo de validez de la licencia se ajusta a la franja etaria del conductor: menores de 21 años: La vigencia es de 5 años (en categorías iniciales como A, B y G). Para la primera licencia, los menores de 18 años (a partir de los 17) deben contar con autorización parental. De 21 a 65 años: La validez estándar es de 5 años.

A partir de los 65 años: La renovación se acorta. Entre los 65 y los 70 años, el plazo es de 3 años.

Mayores de 70 años: La renovación es anual, sin excepciones. Además, a partir de esta edad, la ley exige revalidar los exámenes psicofísicos cada año para garantizar que el conductor conserva las capacidades necesarias para operar un vehículo de manera segura.

REQUISITOS

Aunque no existe una "edad máxima" para tener la licencia, las condiciones médicas y psicofísicas se convierten en factores centrales, especialmente para los adultos mayores, cuya aptitud debe ser constatada periódicamente para mantener la vigencia del permiso de manejo.

Licencias Profesionales (Clases C, D y E): Para estas categorías (transporte de pasajeros, carga, emergencia, etc.), se debe constatar la aptitud psicofísica con mayor frecuencia, por ejemplo, cada 2 años a partir de los 65 años.

Edad Mínima: La edad mínima para obtener la licencia inicial para automóviles y motocicletas es de 17 años (con autorización parental), mientras que para ciclomotores es de 16. La edad mínima para licencias profesionales es de 21 años.