El Congreso analiza un proyecto para reemplazar el peso por el Argentum (AG), una nueva moneda que equivaldría a 1.000 pesos actuales, con el objetivo de simplificar transacciones y recuperar confianza en la moneda local. 

La iniciativa, presentada por el diputado Ricardo López Murphy, plantea su circulación a partir del 1 de enero de 2026, con un período de transición de seis meses donde coexistirían ambas divisas, consignó un artículo periodístico del portal Urgente24.com.

El Argentum busca ordenar un escenario donde el peso ha perdido valor tras años de inflación. Aunque el gobierno descartó la dolarización -prometida en campaña por el presidente Javier Milei-, esta reforma apunta a fortalecer la moneda local sin alterar contratos o derechos adquiridos.

El cambio implicará ajustes operativos: desde la reconversión de precios y salarios hasta la adaptación de sistemas administrativos. Ignacio Martínez Estalas, de Integralis Consulting Group, advierte que la transición requiere planificación para evitar desajustes en tarifas o sueldos. Además, resalta la importancia de una comunicación clara para que el cambio sea percibido como una oportunidad y no como una amenaza.

El proyecto establece que bancos y entidades convertirán automáticamente los saldos (1 AG = $1.000), aplicándose también a jubilaciones y contratos. La medida, de carácter técnico, busca facilitar el manejo contable y financiero, aunque su éxito dependerá de una implementación ordenada.