Este viernes fiscales que trabajan en la investigación del femicidio de Romina Karban pidieron la elevación a juicio en la causa que tiene como único detenido e imputado a Renzo, hermano de la víctima, acusado de homicidio agravado por el uso de arma, codicia y alevosía.

Karban fue asesinada en mayo de cinco disparos por la espalda. Para los investigadores el móvil del crimen fue económico porque Romina era una de las herederas de campos que tenía su padre y no tenía hijos.

La última vez que se la vio con vida a la mujer fue el 8 de mayo cuando dijo que se dirigía al campo de su familia en Colonia Pampa Florida, distante a unos kilómetros del casco urbano de la Ciudad Termal.

El arma, presumiblemente una 9 milímetros por los cartuchos que se secuestraron, nunca pudo ser hallada pero el padre de los Karban contaba con una, allí la sospecha que se ciñe sobre el hermano.

Además, uno de los testigos señaló que Renzo semanas antes del crimen le había consultado si tenía un arma con silenciador

Además, otro dato que compromete a Renzo es que pidió a su hermana que lo busque la mañana que ocurrió el crimen, para, supuestamente trasladarlo a un centro médico ya que dijo que no podía conducir por problemas de salud. Sin embargo, horas después del crimen, manejó hasta el centro de Sáenz Peña pero para los investigadores solo quería “hacerse ver para tener una coartada”.