Jueves 28 de Marzo de 2024

Hoy es Jueves 28 de Marzo de 2024 y son las 18:09 - ALERTA URBANA ...DE LUNES A VIERNES DE 09 A 13 POR FM GUALAMBA 93.7 MHZ.- LO QUE TENES QUE SABER ESTA EN ALERTA URBANA

  • 20.2º

DEPORTES

25 de octubre de 2020

Diego Schwartzman sigue llegando lejos: ganó en Colonia y jugará la final ante Alexander Zverev

🗣(Compartí con nosotros tus comentarios, denuncias, fotos y videos al WhatsApp 3624100411)

¿Se puede presumir de vivir la mejor temporada personal sin siquiera haber ganado un título? Por supuesto. Diego Schwartzman escala el Everest con una fuerza de voluntad brutal, admirable, sostenido en el deseo

¿Se puede presumir de vivir la mejor temporada personal sin siquiera haber ganado un título? Por supuesto. Diego Schwartzman escala el Everest con una fuerza de voluntad brutal, admirable, sostenido en el deseo. El colosal desempeño en Roland Garros, frenado por Rafael Nadal en las semifinales -tal vez, el mejor de todos los tiempos y, además, ganador de París por 13ª vez-, le abrió las puertas a un mundo nuevo. Porque Peque amagaba, retrocedía, avanzaba. Hasta que un día, en un año imposible, se instaló en el puesto número 8 mundial -luego bajó un escalón- y ahora mira sólo hacia arriba. Hacia el Torneo de Maestros, por ejemplo.   A los 28 años, con tres títulos en su plataforma, avanza a lo grande, lejos de los murmullos por su altura y su potencia. Schwartzman tiene cabeza y talento, dos virtudes valiosas para jugar la final de este domingo frente al alemán Alexander Zverev, por el trofeo de Colonia, un certamen ATP 250 de cierto prestigio, con premios por 271.345 euros. En un espectáculo cambiante, luego de dos horas y 31 minutos, superó al canadiense Félix Auger-Aliassime por 6-4, 5-7 y 6-4. Lo definió con una derecha cruzada, profunda. Imposible.   Auger-Aliassime, talento precoz, de 20 años recién cumplidos, fue una prueba de carácter para el porteño, que con una variedad de recursos que se repiten -agresividad, lujos, un altísimo nivel físico-, lo dejó a un costado, con la convicción de que el futuro -y no tanto el presente- será de dominio territorial del canadiense. Un rato antes, Zverev, una joya que no termina de pulirse y reciente finalista del US Open -estuvo 2-0 en sets en Flushing Meadows, antes de ceder frente a Dominic Thiem-, se impuso al italiano Jannik Sinner por 7-6 y 6-3.Peque le lleva una mínima diferencia al alemán, número 7 del ranking: 2 a 1 en el historial. Le ganó en 2014 en Kitzbühel y en 2019 en el Abierto de Estados Unidos (en octavos de final). Zverev se impuso en el Masters 1000 de París 2018.   El derechazo que decidió el partido   El primer parcial fue resuelto con la mano caliente y frialdad en la definición. La segunda parte fue un suplicio: el argentino disponía del servicio para sellar el encuentro, pero se le escapó de entre las manos. El joven de Montreal es bueno; no le pesa la responsabilidad, es un desfachatado. En el set decisivo, apenas comenzado, Peque levantó un 0-40, quebró y arrancó arriba. Hubo vaivenes, variables. Hasta que mostró quién es el que está pasando un gran momento en el circuito.   El escenario visual del estadio de Colonia es oscuro. Un grupo musical, pintoresco, ofrece su repertorio entre puntos. Gradas vacías, ni un murmullo, ni un aplauso; una cancha veloz y techada aparecen como un panorama extraño pero propio de estos tiempos. Peque no se distrae en sinfonías ni en otros detalles: gana. No afloja, por más que trastabilla en algún momento. Vestido con una remera roja y una gorrita blanca -dada vuelta, como siempre-, se mueve sobre el cemento como si fuera la terraza techada de su casa. Al ATP 250 de Colonia 2, en la fría Alemania (ocho grados en el exterior), le da su propio calor.   Schwartzman sumará unos cuantos puntos para el ranking por haber alcanzado la final, cuyo favorito es Zverev (primer preclasificado). El argentino tiene un gran anhelo: acceder al Masters de Londres. Ahora está virtualmente dentro del O2 Arena londinense, ya que se encuentra en la octava posición de la carrera, pero hay varios otros aspirantes, como el italiano Matteo Berrettini, el francés Gaël Monfils y el canadiense Denis Shapovalov.   La victoria de Schwartzman en síntesis   El torneo alemán dio comienzo a la gira europea sobre superficie rápida y bajo techo. Schwartzman cumple la mejor temporada de su carrera, con su acceso a la final del Masters 1000 de Roma y a las semifinales de Roland Garros, instancias en las que perdió contra el serbio Novak Djokovic (1º del ranking) y el español Nadal (2º), respectivamente.   "Me gusta jugar bajo techo. Tuve una buena semana de práctica en Mallorca [en la academia de Rafa Nadal] y estoy listo para seguir luchando", dijo Schwartzman, que el año pasado, en certámenes indoor, alcanzó la definición del ATP 500 de Viena. Sigue enfocado, metido, y trabaja todos los días como si fuera el último. Sabe, intuye, que es aquí. Es ahora.   Fuente: La Nación

COMPARTIR:

Comentarios